jueves, 26 de julio de 2012
4:11
El mundo se cerraba sobre su cabeza. Sonidos que retumbaban en su cerebro. La noche se estaba haciendo larga, tanto que llegaria el amanecer. No hay nada mas que esperar. La luz en tu mirada, la noche que se acaba.
Poco a poco se fue dando cuenta que esta realidad se encontraba perturbada por el ruido, por el calor, por las esencias de perfumes que todos probaban y que les llevaba a un estado superior.
No hay nada mas ahi fuera. De momento, esta era la Tierra. Y el maƱana aun quedaba lejos.
Muy lejos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario